En la actualidad existen diversos tratamientos convencionales con estrógenos, en algunos casos, y con láser ginecológico vaginal, ambos con el fin de ponerle punto final a la sequedad vaginal y al dolor durante las relaciones sexuales.
Se trata de una verdadera afección a la vida íntima de la mujer, ya que dichos estrógenos son los encargados de mantener la flexibilidad y la lubricación de la vagina. Los motivos se pueden deber a la edad, al embarazo, el postparto, la lactancia, la menopausia, las quimioterapia y radioterapia.
¿DE QUÉ SE TRATA EL LÁSER GINECOLÓGICO VAGINAL?
Es un método no invasivo, rápido y seguro según lo explicado por la ginecóloga Alejandra Belardo (M.N. 78.361). Consiste en un cabezal que se introduce en la vagina y emite un haz de energía térmica que se aplica sobre toda la superficie vaginal.
¿CUÁLES SON LOS BENEFICIOS DE ESA TECNOLOGÍA?
Su uso “estimula la producción de colágeno y aumenta el riego sanguíneo. Se regeneran los tejidos y se engrosa la pared vaginal. “Mejora la hidratación a nivel vulvo-vaginal y la elasticidad”, informó.
¿PARA QUIÉNES SIRVE ÉSTE LÁSER?
Está destinada para aquellas pacientes que son no respondedoras a los tratamientos convencionales con estrógenos. “Aquellas mujeres que tuvieron cáncer de mama pueden utilizar algún tipo de estrógeno como el caso del promestrieno, que es una molécula que no se absorbe. Si todo eso no funciona, se puede plantear el uso del láser. Cabe aclarar que este tratamiento no está avalado por las grandes sociedades internacionales de ginecología”, indicó la profesional.
“No se registran efectos adversos. Es una práctica bastante segura y varios estudios han demostrado que el resultado con el láser es tan eficaz como aquellos alcanzados con los estrógenos vaginales. Es una alternativa de tratamiento a tener en cuenta para ciertos casos especiales y no para todas las pacientes en general”, especificó.
El procedimiento consta de tres sesiones, una por mes, y a las 48 horas la paciente puede retomar su vida normal, incluso mantener relaciones sexuales.
CAUSAS DE LA RESEQUEDAD VAGINAL
Durante las relaciones sexuales pueden experimentarse molestias cuando la vagina no se encuentra bien lubricada. Cuando los niveles de estrógenos descienden, el tejido vaginal se encoge y se vuelve más delgado, provocando sequedad e inflamación.
Esta disminución puede deberse a medicinas y hormonas empleadas en el tratamiento para el cáncer de mama, la endometriosis, los miomas uterinos o la infertilidad. Cirugías para extirpar los ovarios, radioterapia en la zona pélvica, quimioterapia, estrés grave, depresión o ejercicio riguroso.
Algunas mujeres presentan este problema después del parto o mientras están amamantando porque los niveles de estrógeno están más bajos en esos momentos.
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