Tras cuatro semanas de haberse celebrado su boda íntima en Las Vegas, este fin de semana, Jennifer López y Ben Affleck volvieron a contraer matrimonio, esta vez, para celebrarlo junto a sus familiares y amigos en Savannah, Georgia.
Como en una escena de película, la pareja ingresó en un barco en el muelle, arribando a la finca de más de 35 hectáreas. La actriz lució un vestido de ensueño de corte sirena, con una larga cola y otro más largo, de varios metros, velo de tul.
En el lugar, que tiene una gran casa principal, de estilo colonial, con 560 metros cuadrados, estaban esperándolos sus familiares, amigos y sobre todo los cinco hijos que tiene la pareja: Violet, de 16 años, Seraphina, de 13, y Samuel, de 10, los que tuvo el actor junto a la también actriz Jennifer Garner; y los mellizos Max y Emme, de 14, nacidos de la relación de la intérprete con el cantante Marc Anthony.
Según se supo, la ceremonia contó con un espectáculo de fuegos artificiales para los invitados por la noche, en una celebración que tuvo de consigna la temática blanca.
Entre los invitados se destacaron Matt Damon y su esposa Luciana, Kevin Smith y su esposa Jennifer, Jason Mewes y su esposa Jordan , el titán agente de talentos (y exesposo de Lauren Sanchez ) Patrick Whitesell y su esposa Pia.
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