En cualquier época del año pero principalmente con los cambios que tenemos actualmente, las enfermedades alérgicas se manifiestan más aún con el calor húmedo. La humedad no suele ser muy amiga de quienes tienen alergia, ya que provoca estornudos o hace pasar un momento desagradable por culpa de la secreción en la nariz.
Por su parte, los ácaros, en la mayoría de los casos y debido al cambio de temperaturas y la humedad, abundan y son una de las principales causas de las alergias. Por eso, el aumento de la humedad en el medio ambiente afecta principalmente a los pacientes alérgicos a esos ácaros del polvo doméstico y hongos.
Al estar expuestos a estos cambios, las personas pueden manifestar síntomas como: estornudos, congestión nasal, prurito o picazón en los ojos y nariz (rinitis), tos, opresión en el pecho, falta de aire, chillido, entre otros. A continuación te dejamos una serie de recomendaciones ante estos casos.
- Evitar la presencia de alfombras, cortinas, peluches, acumulación de objetos y desorden en el hogar de pacientes alérgicos.
- Realizar la limpieza del hogar con aspiradoras que tengan buenos filtros.
- Usar en lo posible colchones, almohadas y cobertores anti ácaros.
- Reparar las pérdidas del sistema de agua domiciliaria para evitar el aumento de humedad.
- Además, para los hongos, moho o humedad, se recomienda limpiar con lavandina. Esa limpieza debe ser realizada en lo posible por personas no alérgicas, ya que inhalar estos productos puede provocar las alergias.
Si sos alérgico y tenés alguna medicación, lo importante es que no la suspendas y si los síntomas aumentan, se recomienda acudir a un profesional para evitar complicaciones.
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