Karen (33) y James (35) Marks se casaron en 2014 y viven en Taunton, 240 kilómetros al oeste de Londres. Durante muchos años, la pareja intentó concebir por vía natural y al no tener éxito recurrieron, como tantas otras parejas, a la fertilización in vitro.
En 2017, la pareja asistió a una clínica especializada en reproducción asistida. Gracias al óvulo de una donante y el esperma de James, lograron congelar cinco embriones.
Por ese tratamiento de fertilización, la pareja tuvo a Cameron, su primer hijo, el 1° de septiembre de 2018. Y tanto Karen como James no querían que el pequeño estuviese solo.
Karen tuvo un aborto espontáneo luego de que le implantaran un nuevo embrión. Pero eso no detuvo los sueños de agrandar la familia: finalmente, el 15 de septiembre de 2020, en medio de la pandemia de coronavirus, nació Isabella.
Como los embriones fueron concebidos el mismo día, a la misma hora y en el mismo lote, por convención internacional, se considera que Cameron e Isabellason gemelos. De igual manera, Karen y James planean recurrir a los otros dos embriones para tener más hijos. Llegado el caso, eso los convertiría en cuatrillizos de edades diferentes.
«A veces los miro y no puedo creer que sea realidad. No solo tengo un hijo hermoso, sino que también una hija ejemplar. Cameron la adora, está orgulloso de ser el hermano mayor y siempre pide tenerla en brazos», señala Karen a Metro.co.uk.
Karen y James planean tener más hijos y la diferencia de edad, presente entre Cameron e Isabella, no les parece un impedimento para su familia. «En el peor de los casos, Cameron tendrá seis cuando nazca el último de los bebés, aunque podría ser aún mayor ya que los embriones no tienen fecha de vencimiento. Es loco haber tenido gemelos con dos años de diferencia. Además los embriones restantes a su vez podría dividirse y podríamos terminar teniendo sextillizos», concluye.
FUENTE: LANACION
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