Psicología y coaching Vida saludable

¿Cómo reiniciar tu cerebro después de la pandemia?

Así como nos adaptamos al comienzo de la cuarentena, deberemos (re)cargar energías para la nueva vida. ¿La clave? Apoyarnos el uno en el otro para sanar.

Imagínese entrar en un bar lleno de gente desenmascarada, hablando, riendo y respirando y arrojando partículas de aerosol al aire sin la amenaza de una pandemia. Deberíamos estar emocionados, ¿verdad? Esto ya no se siente como una fantasía lejana. La tragedia masiva de COVID-19, donde millones de personas han perdido a sus seres queridos, sus trabajos y su sentido de normalidad, puede terminar a fin de año.

Es difícil imaginar poder disfrutar de la vida de la misma manera después del trauma colectivo. “Nunca antes habíamos tenido tanto miedo en nuestra generación”, dice la Dra. Karol Darsa, psicóloga licenciada que se especializa en el tratamiento del trauma. “

Tener de forma permanente la idea de que te vas a enfermar y que podrías morir, el miedo a la muerte es uno de los peores miedos”.

El entusiasmo por las vacunas y el logro de la inmunidad colectiva puede aumentar temporalmente. Pero el optimismo del público, los expertos siguen siendo cautelosos sobre los efectos persistentes de la pandemia en la salud mental.

“Mucho después de que se quiten las máscaras, las personas que no tienen los mecanismos adecuados para afrontar las situaciones sufrirán”, dice Deborah Faust, directora de la Asociación de Salud Mental de Nueva York (MHANY).

“El trauma colectivo casi se ha convertido en una palabra familiar”, dice Faust, quien ha dirigido capacitaciones, programas y defensa legislativa informados sobre el trauma durante más de 20 años. Ahora, dice la especialista, “podemos trabajar para reducir los síntomas del trauma en nuestra sociedad en su conjunto”.

El trauma colectivo se refiere a las reacciones psicológicas a un evento traumático que afecta a toda una sociedad.

“No es el evento en sí lo que es traumático, es nuestra interpretación del mismo”, dice Faust. Lo que es traumático para una persona puede no serlo para otra, dependiendo de nuestros mecanismos de afrontamiento o de nuestra exposición a experiencias traumáticas pasadas.

ESTRÉS DIARIO & ESTRÉS TRAUMÁTICO

“Con el estrés, cuando se resuelve el asunto en particular por el que estamos estresados, se reduce”, dice Faust. “La diferencia entre el estrés regular y el estrés traumático es que una vez que se elimina el evento o la circunstancia por la que estamos estresados, el síntoma sigue ahí”.

El trauma afecta tanto nuestra salud física como emocional. “La gente tiene todo tipo de síntomas físicos”, dice Faust. “El trauma se almacena en nuestro sistema nervioso y nuestros cuerpos comienzan a señalar ese trauma a través de enfermedades y cambios en la salud mental, afecciones crónicas, adicción, insomnio, todo tipo de cosas”.

Encontrar una solución a los efectos del trauma colectivo puede resultar un desafío. Los esfuerzos internacionales de vacunación tienen prioridad y gran parte del mundo sigue experimentando picos en los casos positivos.

Vía: elle.clarin.com