Vivimos en una época que no sabe esperar. Todo es inmediato, urgente, visible. Y sin darnos cuenta, empezamos a exigirnos el mismo ritmo para la vida emocional...
Vivimos en una época que no sabe esperar. Todo es inmediato, urgente, visible. Y sin darnos cuenta, empezamos a exigirnos el mismo ritmo para la vida emocional...