Psicología y coaching

¿Cuán efectiva es la terapia online?

A quienes no les quedó otra que animarse a la teleterapia y, si bien muchos admiten que siguen prefiriendo las sesiones cara a cara, en este contexto, antes de no hacer nada, es una muy buena opción.

«Cuando las actividades vuelvan a la normalidad, recurriría a la terapia online si salgo tarde del trabajo, en lugar de cancelar la sesión, por ejemplo. Me parece que se abrió una nueva posibilidad para estos casos», opina Lucia.

Chatear sobre tus sentimientos

La Lic. Mariana Kersz, psicóloga, cuenta que actualmente está atendiendo a varios de sus pacientes por chat. Sí, en lugar de tener una sesión por videollamada, lo hacen por WhatsApp.

«Lo utilizo con personas que tienen hijos o parejas y no tienen la posibilidad de aislarse para la consulta psicológica, ni tampoco quieren hablar delante de ellos. Hacemos 45/50 minutos de sesión y en lugar de hablar, lo hacemos por escrito», explica la directora de Clínica de Parejas.

Kersz trabaja hace años de manera online y cuenta que, inclusive hoy con la cuarentena total extendida, muchos de sus pacientes que al principio se mostraban reticentes a probar, la llamaron para empezar a atenderse a través de videollamada.

«Hay que desmitificar la creencia de que el formato de la terapia online no sirve, se trata de un concepto primitivo en el que la terapia debe ser presencial, junto al compromiso semanal del paciente de acudir al consultorio. Hoy, eso es más laxo y se pueden pensar otros modelos psicoterapéuticos muy exitosos y no necesariamente presenciales», asevera.

¿Cuán efectivo es este método?

Para la psicóloga, la terapia online es tan efectiva como la tradicional. «Para mí, inclusive, en algún punto la supera, porque brinda más flexibilidad para los pacientes», sostiene Mariana Kersz, que además de psicóloga es sexóloga.

Quienes están limitados para trasladarse al consultorio, como mujeres al cuidado full-time de sus hijos o atravesando el postparto, personas internadas, enfermos o todos las personas en este momento de cuarentena total, pueden continuar con su terapia de manera online.

Para la teleterapia solo se necesita contar con dispositivo como un smartphone, computadora o tablet y descargar algún programa que permita hacer una videollamada: Zoom, Skype o WhatsApp, son los más usados.

«Me pasa con pacientes de sexología que me piden el horario del almuerzo para la sesión y aprovechan ese momento de intimidad desde un bar, por ejemplo. Así optimizan tiempo, dinero y productividad», cuenta y explica: «Atiendo en Palermo y tengo pacientes que trabajan, por ejemplo, en Puerto Madero y viven en Olivos. Les resulta más eficiente que los atienda por Skype que venirse hasta mi consultorio».

¿La terapia online es para todos y todas?

«A mi criterio y por mi experiencia, todos los pacientes pueden tomar sesiones de terapia online en tanto y en cuanto lo deseen y estén cómodos con el formato», afirma Kersz.

Eso sí, en casos más graves en los que hay medicación psiquiátrica de por medio y en los que hay que hacer un trabajo interdisciplinario, como adicciones o psicosis, la experta sostiene que podrían atenderse online, pero a través de una aplicación adecuada para llevar a cabo este tipo de terapia en equipo con varios profesionales y el paciente.

Y para los que creen que se trata de una terapia solo apta para millennials, la psicóloga se encarga de desmitificarlo. «He atendido a una paciente de setenta y pico de años que había tenido una operación, por lo que hacíamos terapia online desde el hospital. Su hija hacía la llamada desde su teléfono por Skype, se iba y con su madre teníamos las sesiones en total intimidad».

Cómo prepararse para una consulta online

  • Ponerse en el mood para la sesión. Si es posible, lo recomendable es darse un tiempo de transición para antes y después de la sesión. «El viaje hasta el consultorio del terapeuta proporciona una zona de amortiguación integrada entre la terapia y lo que sea que hagas antes y después. Con la teleterapia, por el contrario, es fácil entrar en una sesión con el estrés de cuidar a los niños, atender a las mascotas, trabajar desde casa o discutir con la pareja», sugiere el psicoterapeuta Seth J. Gillihan en WebMD.

Si tu sesión psicológica dura 45 minutos, por ejemplo, la idea es bloquear 60 minutos en total y dedicarle 5 minutos a una respiración relajada antes de la sesión y 10 minutos después de tranquilidad para procesar los pensamientos y emociones trabajados con el terapeuta.

Buscar un lugar tranquilo para la sesión online, es clave.
Buscar un lugar tranquilo para la sesión online, es clave. Crédito: Unsplash
  • Buscar un ambiente tranquilo. Aunque la tranquilidad en casa hoy puede parecer una utopía, la idea es buscar un lugar donde te sientas a gusto y puedas interactuar con naturalidad en la llamada con el terapeuta.

Lo mejor es armarse un lugar idóneo para la terapia, sin interrupciones y en donde no te sientas escuchado. «Muchas veces en la terapia psicológica se tratan cuestiones vinculares, entonces si una mujer está hablando de una problemática con su marido y éste se encuentra a medio metro, la situación será muy incómoda. De hecho, esta es la principal razón por la cual los pacientes eligen no hacer teleterapia, pero con ingenio y organización se puede lograr», afirma Kersz.

Una buena alternativa para propiciar la intimidad es usar auriculares. También, lo ideal es coordinar con la familia para poder darse este rato a solas, sin distracciones. Por ejemplo, organizarse con la pareja para que cuide a los niños; si se está sola con hijos, pautar la sesión para la hora de la siesta de los chicos; o si estás sola con tu pareja, hacerlo cuando el otro salió a hacer la compras.

  • Evitar distracciones. Es necesario bloquear las notificaciones de e-mails, chats y apagar la TV o radio para poder enfocarse al 100% en la charla con el terapeuta.
  • Asegurarse de ciertas cuestiones técnicas antes de la sesión. Lo recomendable es probar que el programa que se vaya a usar funcione bien en el dispositivo y asegurarse de que la conexión a internet no falle.
  • De todas formas, si la videollamada se corta, la Lic. Mariana Kersz aclara que se puede volver a intentar, o seguir por teléfono o por chat. En el último caso, se puede reprogramar la sesión. «Es parte de la flexibilidad de la terapia online», concluye.

Fuente: lanacion.com