Psicología y coaching

Por qué es tan importante cómo te hablas

Ya sea en los deportes o en la vida cotidiana, una de las leyes ya probadas es que te conviertes en tus ideas. Parte de lo que piensas normalmente es el cómo te hablas y qué te dices. Esto es lo que llamamos el dialogo interno.

Y no importa cuál sea tu objetivo: bajar de peso, hacer ejercicio, tener éxito profesional, casarte, tener hijos; el punto es que tú te conviertes en un reflejo de la forma en que te hablas, porque es en lo que te estás focalizando.

Entonces como manifestamos en nosotros todo aquello en lo que estamos focalizados es muy importante que elimines de tu vocabulario y de tu pensamiento las siguientes ideas negativas que son tan comunes en el dialogo interno.

Elimina el «soy tan tonto»

Esta frase es fuerte, trata de eliminarla de tu forma de hablar en lo que respecta a vos. Nunca se juega con nuestros estados de ser porque inconscientemente nos “compramos” la idea de inmediato. Y si eres tonto entonces vas vivir de acuerdo a ello, haciendo tonterías todo el tiempo.

Tal vez algo que hiciste no te salió como esperabas, pero eso no significa que seas tonto.

Elimina el «no puedo»

Primero que nada, cambia el no por el si.

¿Y segundo, sabes quién está hablando aquí? Tu “zona de confort” no le hagas caso, o trata de reconocer cuando el pensamiento proviene desde ahí.

También es importante entender que podemos pedir ayuda, no tenemos que hacer todo solos, siempre se vale apoyarnos de otras personas, de cursos, de herramientas, lo que sea necesario para el logro de nuestros objetivos y metas.

Así es que recuerda esto y repítelo constantemente en ti: ¡Sí puedo, Si quiero y Sí me lo merezco!

Deshazte del «soy demasiado»

Tú eres suficiente para ser y hacer lo que quieras y decidas

Ese soy demasiado viejo para esto, o demasiado joven, demasiado gordo, demasiado delgado, etc. Todas esas afirmaciones lo único que están diciendo realmente es que “No eres suficiente para ello de acuerdo a lo que tú crees que es la norma” Y eso no es lo cierto.
Tú eres suficiente para ser y hacer lo que quieras y decidas,  no permitas que te digan lo contrario ni pensarlo.

Elimina el «estoy tan cansado»

Si te dices a ti mismo que estás cansado, ¿adivina qué? Te vas a sentir cansado.

Aún y cuando realmente estés cansado, no necesitas recordartelo constantemente porque se convierte en tu focalización y volvemos a lo mismo, manifiestas todo aquello en lo que estas focalizado y por consiguiente siempre estarás cansado.

Si quieres más energía, empieza actuando como si ya la tuvieras. Párate derecho, respira profundamente, sonríe y empieza a decirte a ti mismo que tienes toneladas de energía.

Obviamente hay que acompañar esto con algunos cambios de hábitos como tener una dieta saludable alta en energía y ejercicio regular, pero el simple hecho de que cambies tu idea de “estoy cansado” por “tengo mucha energía” te ayuda a decretarla y tenerla.

Deja de pensar en que «esto siempre te pasa a ti»

Si normalmente te suceden cosas malas o negativas, entonces deja de invitarlas a tu vida. Esto puede sonar un poco duro pero es totalmente cierto.

Nosotros somos 100% responsables de todo lo que nos sucede (consciente o inconscientemente). Y hasta que no reclames y aceptes esa responsabilidad por todo en la vida, entonces siempre seguirás siendo víctima de las circunstancias. Y eso te roba tu poder personal y destruye tu autoestima.

Tu vida no depende de un tercero, del entorno, del destino, de la suerte, de nada ni de nadie. Solo de tí. Así que toma el control de tu vida! ¡Decide lo que quieres vivir! Así es que bueno o malo, toma la responsabilidad de tu vida, y jamás te culpes. A nadie le gusta convivir con las víctimas que todo el tiempo están “pobre de mi»

¡Sé un líder! ¡Se una persona que crea lo que desea en su vida! Claro, a veces no salen las cosas como queremos, pero sólo haz un ALTO, analiza la situación sin juzgarte ni culparte y cambia las cosas para seguir adelante.

 

Fuente: Cree en vos

Opinar

Clic para opinar